La utilización de un lápiz o una brocha para las cejas es fundamental para recrearlas cuando las tienes muy debilitadas. Conseguirás devolver la máxima expresividad a tu rostro. Utiliza tonos similares al de tu pelo y asesórate con un experto sobre la mejor forma de aplicación.
- Escoge un polvo del color de tus cejas o un lápiz para las cejas de un tono semejante al de tus propias pestañas.
- Utiliza un lápiz para hacer un punto directamente en el hueso de las cejas por encima la esquina interior del ojo. Ahí es donde la ceja debería empezar.
- Pon otro punto directamente en el hueso de las cejas por encima del borde externo del iris, la parte del ojo con color. Este punto marca el punto más alto del arco de la ceja.
- Colocar el lápiz en diagonal desde la esquina inferior de la nariz hasta la esquina exterior del ojo. Haz un pequeño punto para definir el punto final de tu ceja. Debe estar un poco por encima que la esquina interior.
- Une los puntos con pequeños golpecitos de color en movimiento ascendente, afilando el trazo cuando te vayas acercando al punto final.
- Alisa con suavidad el trazo mediante un pincel de cejas o la brocha que se encuentra en el mismo lápiz de cejas.
- En los talleres de “Ponte Guapa…te sentirás mejor” los Expertos en Cosmética estarán encantados de ayudarte.